¿RAPIÑA O EJECUCIÓN?

Marcha contra la inseguridad por Susana Odriozola: ¿fue rapiña o ejecución?
A las 15, los judiciales realizarán protesta. Asociación Comercial había advertido a Jefatura. Gremio policial descree de la hipótesis de la rapiña.
Hoy, a las 15, se llevará a cabo en San José un marcha contra la inseguridad, tras el asesinato de la alguacil judicial Susana Odriozola, hermana de la jueza penal María Noel Odriozola.
La marcha es convocada por la Asociación de Funcionarios Judiciales. Habrá, no obstante, guardias gremiales en juzgados de familia, adolescenrtes y penales, además de la morgue judicial.
El problema de los robos con violencia en la zona céntrica es un tema muy actual en San José de Mayo.

Sus horas antes de que Susana Odriozola fuera ejecutado de un tiro en la cabeza la Asociación Comercial de San José se había reunido con el jefe de Policía local para hacerle una serie de planteos.
Sin embargo, el sindicato policial emiitó un comunicado en el que se descree de la hipótesis oficial de la rapiña "que salió mal", coincidente con la declaración de los dos delincuentes que admiten haber estado en la escena del crimen.
Para el gremio, hay señale -disparo de media distancia a la cabeza- que no se condicen con una rapiña a una mujer sola en un lugar en el que no habia nadie.
"El móvil no fue el robo, pues se disparó en forma mortal son tocar las pertenencias", señala el escrito.
En un principio, las autoridades dejaban entrever una gran preocupación por el hecho en sí, pero además por la forma en que fue ejecutada la victima. No es común en San José este tipo de violencia extrema.

SICARIATO
La hipótesis de sicariato estuvo siempre sobre la mesa, en función de la actividad de la hermana de la jueza, quien ha debido intervenir en casos de narcotráfico.
Mariel Noel Odriozola actuó en caso de alto perfil por disputas territoriales en la zona oeste de Montevideo.
Por ejemplo, entendió en el asesinato, descuartizamiento, incineración y enterramiento de dos jóvenes (Emiliano González y Jorge Cotelo) en el barrio El Tobogán, frente al estadio de Cerro.
Las ejecuciones databan del mes de mayo, y el descubrimiento en un rancho de la zona fue en agosto.
El hallazgo de los cadáveres enterrados supuso un nuevo capítulo en la violencia cruzada entre narcotraficantes. Hasta el momento, los muertos de los ajustes de cuenta quedaban a la vista de la Policía.
La justicia concluyó que dos líderes del cartel de Casabó, "Manolo" y "El Tulita" habían sido responsable del caso.
Ambos fueron también imputados en el asesinato de un hombre de 25 años y su sobrino de 15 meses en la zona del Cerro.
También están relacionados con la ejecución de un matrimonio paraguayo en la avenida Giannatasio. Este caso estuvo en manos del juez Raimondo y la fiscal Mascaró.

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