Alas Uruguay sorprendida por actitud de ANCAP
El cambio de rumbo en la gestión de ANCAP ha comenzado a reflejarse, por ejemplo, en el control que están teniendo las ventas de combustibles que se realizan a Alas Uruguay. El antecedente negativo con la ex Pluna hace que hoy el ente se niegue a otorgarle crédito a la aerolínea autogestionada.
El cambio de rumbo en la gestión de ANCAP ha comenzado a reflejarse, por ejemplo, en el control que están teniendo las ventas de combustibles que se realizan a Alas Uruguay. El antecedente negativo con la ex Pluna hace que hoy el ente se niegue a otorgarle crédito a la aerolínea autogestionada.
Hasta ahora la aerolínea uruguaya compraba el
combustible a ANCAP de forma prepaga para toda la semana. En los últimos días
la gerencia comercial del ente petrolero se comunicó con autoridades de Alas
Uruguay para solicitar que calcularan con exactitud la cantidad de combustible
que necesitaban, porque no estaban dispuestos a otorgar ningún tipo de
financiamiento.
"Ha habido intimaciones para que calculemos
claramente cuánto es el combustible diciendo que no tenemos ningún tipo de
crédito, ni si quiera si nos pasamos en dos litros de combustible el fin de
semana", dijo a radio Carve el vicepresidente de Alas Uruguay, Nicolás de
los Santos. Hoy el ente abastece los aviones una vez que tiene el comprobante
del depósito bancario y la seguridad que el dinero está acreditado en cuenta.
La actitud de ANCAP causó sorpresa en Alas Uruguay
que entabló contactos nuevamente con Petrobras para pedir cotización y
eventualmente comprarle combustible. Según De los Santos, ahora la compañía
"descubrió" que el ente le está vendiendo el combustible a un precio
más caro del que le ofrece la multinacional brasileña.
Por otro lado, De los Santos indicó que en cuatro
meses de operativa, la empresa transportó 27.000 pasajeros y operó 39 chárters.
Esos números, según dijo, superaron lo previsto inicialmente en el plan de
negocios. "En mayo proyectamos ingresos por US$ 1.200.000 y costos por US$
1.500.000. Estamos cerca del equilibrio", expresó.
Además, De los Santos indicó que el retraso en el
otorgamiento de las certificaciones por parte de la Dirección Nacional de
Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia), trastocó de forma
considerable los planes que tenía la compañía, porque hizo perder la temporada
y obligó a tener que invertir casi el doble de lo que estaba previsto para la
primera etapa. Por otro lado, negó que se haya solicitado un nuevo
financiamiento al gobierno y aclaró que el planteo fue en dirección a qué
alguien se debía hacer cargo por los prejuicios que ocasionaron las demoras de
las certificaciones.
La compañía pretende reforzar su plan de negocios y
por eso se gestiona el acuerdo con la estatal Boliviana de Aviación (BOA).
"Podemos vender hasta el 49% de las acciones. Sería una forma de
financiamiento y puede ser parte del acuerdo" con la aerolínea boliviana,
explicó De los Santos.
Fuente EL OBSERVADOR
Fuente EL OBSERVADOR