DOS VECINOS EVITAN UNA TRAGEDIA
Entre tantas historias, hay algunas que merecen, no sólo ser contadas, sino también reconocidas. Esta es una de ellas.
(MINAS Arequita DIGITAL)El día de ayer no había sido fácil para Andrés Virriel y Daniel Vázquez, vecinos del Barrio Escriu de la ciudad de Minas. Por la noche, en casa de Daniel, los ánimos no eran los mejores, y hacer los mandados fue la excusa perfecta para salir a despejarse un poco. Minutos después, salvarían una vida.
Mientras cruzaban el puente sobre el Arroyo San Francisco, vieron una persona junto a la baranda. Algo andaba mal. La hora, la actitud... algo estaba fuera de lugar. Dieron la vuelta, esta vez urgidos por la sensación de que fuera lo que fuera, no tardaría en suceder. Llegaron justo a tiempo.
Una mujer, provista de un cable, intentaba quitarse la vida. La contuvieron, llamaron a emergencias, esperaron la llegada de auxilio.
Daniel, funcionario de CAMDEL, habló con nosotros en la mañana y nos confirmó lo sucedido en los hechos y nos expresó su sentir al respecto. "Para los dos -nos cuenta- fue como la revancha de un día complicado. No sentimos que hayamos hecho algo especial, pero nos sentimos bien, nos hace sentir bien el darnos cuenta que hicimos lo correcto, que hicimos lo que debíamos al no mirar para otro lado como si lo que pasaba no fuera nuestro problema. En nuestros trabajos, nos toca ver muchas cosas, y no siempre podemos ayudar. Lo de ayer nos ayudó a dormir tranquilos"
¿Héroes? ¿Vecinos solidarios? Es difícil elegir los adjetivos, sin embargo, en momentos en que la sociedad necesita personas que dejen de mirar para el costado y se involucren en lo que está pasando a su alrededor, ellos lo hicieron, sin calcular ventajas o esperar reconocimiento. Lo hicieron porque, aunque no siempre lo tengamos presente o no esté de moda, preocuparse por el otro debiera ser un gesto espontáneo y no una rareza.
Una mujer, provista de un cable, intentaba quitarse la vida. La contuvieron, llamaron a emergencias, esperaron la llegada de auxilio.
Daniel, funcionario de CAMDEL, habló con nosotros en la mañana y nos confirmó lo sucedido en los hechos y nos expresó su sentir al respecto. "Para los dos -nos cuenta- fue como la revancha de un día complicado. No sentimos que hayamos hecho algo especial, pero nos sentimos bien, nos hace sentir bien el darnos cuenta que hicimos lo correcto, que hicimos lo que debíamos al no mirar para otro lado como si lo que pasaba no fuera nuestro problema. En nuestros trabajos, nos toca ver muchas cosas, y no siempre podemos ayudar. Lo de ayer nos ayudó a dormir tranquilos"
¿Héroes? ¿Vecinos solidarios? Es difícil elegir los adjetivos, sin embargo, en momentos en que la sociedad necesita personas que dejen de mirar para el costado y se involucren en lo que está pasando a su alrededor, ellos lo hicieron, sin calcular ventajas o esperar reconocimiento. Lo hicieron porque, aunque no siempre lo tengamos presente o no esté de moda, preocuparse por el otro debiera ser un gesto espontáneo y no una rareza.
Andrés es policía, y con mucha amabilidad nos dijo que prefería no hacer declaraciones a la prensa considerando que no correspondía, a pesar de que todo sucedió fuera del horario de servicio. Sí nos confirmó su participación y nos autorizó a mencionarlo, aunque confió en su amigo Daniel la tarea de encontrarse con Arequita Digital. La fotografía, que nos parece justo publicar, fue obtenida de su perfil de Facebook, y contamos con su autorización para hacerla pública.
NOTA AREQUITA DIGITAL