
La tragedia parece de una trama cinematográfica, aunque es la pura realidad.
El joven alférez, de 23 años, soltero, tiró de la cuerda y el paracaídas no se abrió.
Luego tiró de la reserva y tampoco se abrió. Se precipitó en caída libre hasta su muerte.
El infortunado había saltado junto a otros estudiantes, que no tuvieron problemas con sus paracaídas.
El cuerpo permanece en el lugar mientras investiga la justicia.
Fuente EL ESPECTADOR
Fuente EL ESPECTADOR