La policía francesa retuvo el pasado domingo un coche con matrícula diplomática del Vaticano, propiedad del cardenal argentino Jorge María Mejía, cargado con cuatro kilos de cocaína y 150 gramos de marihuana procedente de España y en el que viajaban dos hombres.

Los dos ocupantes, de nacionalidad italiana con 30 y 41 años respectivamente, afirmaron que la droga no era suya y que eran simples chóferes. El vehículo pertenece a Jorge María Mejía, cardenal argentino de 91 años (bibliotecario emérito de la Santa Sede).
Según los elementos disponibles, el secretario particular de Mejía -bibliotecario emérito de la Santa Sede, de 81 años-, les había entregado el vehículo unos días antes para que realizaran una revisión, pero aprovecharon para ir a España y comprar los estupefacientes.
Estaban convencidos de que la matrícula diplomática impediría que los detuvieran, señaló la emisora.
Ni la Policía Judicial francesa ni la Fiscalía de Chambéry -encargada del caso- quisieron hoy hacer declaraciones sobre estos hechos. EL ESPECTADOR EFE